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Los archivos de las bandas de música

Durante 2018 pudimos culminar un proyecto de grabación en el que se registraron ocho piezas españolas para clarinete y banda del siglo XIX. El CD se realizó con la participación de las bandas de música de tres localidades diferentes y formó parte de una labor de recuperación del repertorio español para clarinete que comenzó hace ya más de dos décadas.

A lo largo de estos años, han aparecido obras españolas desconocidas para mí en los lugares más diversos: desde bibliotecas de todo tipo y anticuarios hasta mercadillos, almonedas y archivos de catedrales e iglesias. El número de piezas encontradas durante este tiempo es significativo y la mayoría de ellas han sido publicadas y grabadas a través de la editorial Bassus Ediciones. En ocasiones, durante la búsqueda, una escueta noticia en los documentos de la época conducía hacia el repertorio de las bandas. Así entré en contacto con sus archivos musicales, por entonces prácticamente desconocidos para mí y sobre los que mi buen amigo José Miguel Ibánez Lax me ha animado a escribir estas líneas.

De Pérez Casas a Monlléo

La primera pieza del repertorio para clarinete y banda que publicó la editorial fue una obra del compositor murciano Bartolomé Pérez Casas. El músico de Lorca la había depositado junto a otras composiciones suyas en la Real Academia de Bellas Artes de Madrid. Se trataba del «Primer solo», pieza que edité y grabé en una versión para clarinete y piano en 2007.

En 2010, de nuevo una referencia me llevó al repertorio de banda. Hablaba de una pieza que gozó de gran popularidad a mediados del XIX y que interpretaba la Real Banda de Alabarderos: la «Fantasía para clarinete» de Manuel Monlleó. Por desgracia, el archivo de Alabarderos desapareció durante la Guerra Civil y apenas tenía referencias sobre el compositor. Ese mismo año contacté con el archivo de la Banda Corporació Musical Primitiva D’Alcoi. Gracias a un listado de obras colgado en su página web supe que allí se conservaban varias piezas concertantes para clarinete.

Una vez en Alcoy, tanto el director de la banda, Àngel Lluís Ferrando, como su hermano Jaume, el responsable del archivo, pusieron a mi disposición todas las partituras que les solicité. Por cierto, el archivo es uno de los más antiguos de España y una auténtica joya para los estudiosos de nuestro patrimonio musical. Quiso la fortuna que Àngel Lluís fuera por aquellos años también director de la Banda de la Societat Musical La Pau de Beneixama. Tenía noticias de que el archivo de esa sociedad musical había tenido cierto contacto con el de Alabarderos, así que pronto acordamos una visita. Nada más llegar advertí que el archivo hacía justicia a su fama y ¡allí estaba la única copia conocida de la Fantasía de Monlleó!

Grabación de repertorio inédito

Un proyecto de grabación de ese repertorio inédito para banda en su instrumentación original iba tomando forma. El resto del repertorio que aparece en el CD se completó con piezas para clarinete conservadas en el archivo de la Banda de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, la banda en la que me formé y empecé con el clarinete. Con la ayuda de su director, Ángel Hernández Azorín, pudimos coordinar la realización de la grabación. Curiosamente, la obra más antigua del archivo de Yecla es una «Fantasía obligada de clarinete», una pieza compuesta alrededor de 1860, de autor anónimo, y con una instrumentación de reducidas dimensiones en la que todavía no aparecen los saxofones. Así la grabamos en el CD.

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La búsqueda que hice en los archivos bandísticos en absoluto fue exhaustiva. Aparte de los de Alcoy, Benejama y Yecla, pude visitar unos pocos más, pero con lo encontrado en las tres ciudades fue suficiente para completar el proyecto y entrever un enorme legado de música de una riqueza insospechada en el que, ¿por qué no?, seguramente se conserve alguna maravilla en espera a que se le rescate del olvido.

En lo que respecta al clarinete, en los archivos de bandas he encontrado varias piezas extraordinariamente bien escritas que merecen formar parte del repertorio, pero también me he cruzado por el camino con obras concertantes para otros instrumentos, sobre todo para flauta, trompeta y saxofón. Todo indica que, ante una red no muy nutrida de orquestas en el siglo XIX, muchas de ellas solo orquestas de foso, los mejores instrumentistas de viento de la época encontraron en la banda de música el sitio natural en el que demostrar sus habilidades musicales.

La música que escuchaban e interpretaban nuestros abuelos

Dentro de este formidable legado de miles de composiciones es evidente que no todo será música de calidad. Es más, probablemente una parte significativa consista en piezas hechas sin otra pretensión que la de entretener y que difícilmente encontrarán acomodo hoy día en los programas de conciertos, como por ejemplo los cientos de bailables en forma de tanda de rigodones, valses, mazurkas y redowas.

Pero incluso esas obras son valiosos documentos y, como música con la que se divirtieron y emocionaron nuestro abuelos, constituyen un precioso testimonio de nuestra historia. Conviene recordar que la partitura se puede estudiar no solo desde el punto de vista de su naturaleza artística y su relación con la interpretación, sino también desde el análisis de su soporte físico.

Impresa o manuscrita, la partitura es el medio de conservación de la música del pasado, su estudio aporta valiosa información sociológica de consumo de la música en una época determinada. Es innegable que el estudio de los archivos de las bandas de música, junto al importantísimo valor sociointegrador de la educación musical proporcionada por éstas a lo largo de los dos últimos siglos, son elementos imprescindibles para el conocimiento de la realidad cultural y musical de la sociedad española de los siglos XIX y XX. Cualquier historia de la música española que no los tenga en cuenta estará incompleta.

Huellas y Memorias

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El CD de obras españolas para clarinete y banda del siglo XIX lo titulamos «Huellas y Memorias«. ¿Por qué el título? Huellas hace referencia al rastro dejado por estas piezas, unos indicios que nos llevaron a los archivos de nuestras bandas. Y Memorias porque, al tomar contacto con las asociaciones musicales presentes en este CD, tuvimos la ocasión de hablar con sus músicos y para los más veteranos este repertorio no era del todo desconocido.

Se trataba, por tanto, de una música que estuvo viva hasta no hace mucho. Fueron necesarios ocho años de trabajo con tres sociedades musicales, visitas a sus archivos, estudio histórico de las piezas elegidas y sus autores, varias sesiones de grabación y casi 300 músicos implicados, pero he de decir que este ha sido uno de los proyectos más gratificantes que he realizado. Gracias a todos los que lo hicieron posible.


Artículo publicado por Pedro Rubio en el blog de la Federación de Bandas de la Región de Murcia en el diario La Verdad

Publicado en CD clarinete conciertos partituras Pedro Rubio

Un comentario

  1. Antonio Antonio

    Mis felicitaciones por este CD «Huellas y Memorias». En el nº 2 de la revista Estudios Bandísticos aparece una crítica-reseña sobre este CD.

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